Lo que escondemos en el closet: En lo más profundo del closet

¿Qué escondes? Quizá unos pantalones dos tallas más pequeñas que guardas pensando que un día te quedará nuevamente. O tal vez ese vestido, que aún esperas la ocasión ideal para usarlo; como en las películas, esperando cumplir tus sueños realidad con ese vestido puesto.

A veces en nuestro clóset podemos ocultar más de lo que esperamos; miedos, sueños, aspiraciones y realidades que no queremos aceptar. Es un lugar más profundo de lo que aparenta, tiene un doble fondo y probablemente nunca te diste cuenta.

Hace un tiempo estuve leyendo el libro “La Magia del Orden” de Marie Kondo (también tiene una serie en Netflix) donde ella te explica que el orden era más allá que poner las cosas en su lugar. En su efecto, quedé obsesionada con el libro y empleé las técnicas que especificaba. Me duró alrededor de un mes. Mi ropa ya no estaba perfectamente doblada, si no que la encontrabas tirada en la cajonera o peor, en el piso. Mis chaquetas estaban colgadas en la puerta del clóset en vez de estar colgadas dentro de este y había olvidado toda la dulzura y amor que debía sentir por mi ropa, mi ansiedad y estrés había superado mi capacidad de razonar que la ropa que estaba llevando había soportado un día tan largo como el mío.

Con esto llegué a la conclusión de que antes de ordenar nuestro clóset, debemos ordenar nuestra mente. Nuestra ropa dice más de nosotros que lo que nos gustaría, más allá de un estilo específico, es la esencia de la persona lo que puedes determinar solo mirando su clóset. Mirando su orden y lo prolijo que es a la hora de escoger un atuendo, no hablamos de Fashion o No-Fashion, si no de la preocupación al momento de escoger algo tan simple y básico como lo que usaremos a lo largo del día, por el resto de nuestras vidas. Tu estilo puede determinar quizá la música que te gusta o cosas banales, pero el sentimiento y la pulcritud, determina tu personalidad. ¿Espeluznante, no creen? Hagan la prueba fijándose en los pequeños detalles de la gente que los rodea, cosas como si los zapatos están lustrados o si no le falta ningún punto a la ropa, eso puede determinan que tan preocupado eres con tu vida en general. Fue algo que me costó aceptar, eh, yo decía: “No, pero ¿cómo mis zapatos van a determinar si, soy o no, responsable?” No me hacía mucho caso, hasta que fui honesta y me di cuenta que en mi vida personal si era un poco dejada, entonces, ¿cómo no lo iba a ser con mis zapatos?

El guardarropa no puede hablar por nuestro futuro, sin embargo, sí por nuestro pasado y presente. Como cuando encuentras una prenda vieja y te da nostalgia, esa camiseta que no usabas hace años; Marie Kondo dice que debemos despedirnos de la ropa que no nos causa una felicidad extrema y solemos hacer lo contrario, guardamos aquellas cosas que nos crean nostalgia, aunque lleven años sin usarse.

Así mismo, guardamos rencores o tristezas en nuestro subconsciente, porque opacan los sentimientos de felicidad extrema. Ustedes me preguntaran, ¿cómo sé si la prenda me hace realmente feliz?, sencillo, busca tu camisa, pantalón, zapatos favoritos y ve como sentirás esa sensación en el estómago; cuando vayas a desechar/conservar algo, compáralo con esa sensación. Si se asemeja, guárdalo; si no lo hace, bótalo.

Mi idea con este blog es que pasemos al otro lado del clóset, como Hannah Montana y descubramos un mundo más allá de lo que pensábamos conocer. Entender que cada prenda de tu cajonera representa un

sentimiento o una idea, y poder ordenarlas para crear un mejor estilo de vida y por, sobre todo, un buen

outfit.

Espero te guste encontrar lo que escondes en el clóset.

Por: @nerdycaro